Probable retrato escultórico de la hija de Isabel II en el que se advierte la naturalidad y el realismo propios del artista romántico valenciano, último escultor de cámara.
La Infanta María Cristina falleció el 8 de enero de 1854, a los tres días de nacer. José Piquer la representa semidesnuda y tumbada sobre un colchón y una almohada lujosos y adornados con flores de lis.
Características de la obra
Objeto
Figura
Dimensiones
Altura = 23 cm; Anchura = 37 cm; Profundidad = 62 cm
Técnica
Esculpido
Materia
Mármol