Su origen es musulmán, pero fue reconstruida en estilo renacentista por Alonso de Covarrubias en el siglo XVI. Está compuesta por dos cuerpos: el que da a la ciudad se abre con un arco de medio punto flanqueado por torreones cuadrados rematados por tejados y un escudo de Carlos I en la parte superior; y el lado externo, con un arco presidido por el escudo de la ciudad y flanqueado por dos grandes torreones circulares.