Es uno de los cuatro puentes que atraviesan el río Ebro a su paso por Logroño. También es denominado como Puente de San Juan de Ortega y su construcción actual data de 1884, tras el derrumbe del antiguo puente en 1871. Es uno de los símbolos de la ciudad, apareciendo en su escudo y siendo el lugar de entrada del Camino de Santiago a la ciudad.